Noto (Sicilia)

Perteneciente al libre consorcio municipal de Siracusa, sucesor de la extinta provincia homónima, la localidad da nombre al Val di Noto.

Su costa, entre Avola y Pachino, da el nombre al golfo homónimo.

La ciudad antigua, Noto Antica, queda 8 km directamente al norte sobre el monte Alveria.

En los siglos XVI y XVII, la ciudad vio surgir a varios intelectuales notables, como Giovanni Aurispa, los juristas Andrea Barbazio y Antonio Corsetto, así como el arquitecto Matteo Carnelivari: en 1503 el rey Fernando III le dio el título de civitas ingeniosa («ciudad ingeniosa»).

La devastación de la ciudad del monte Alveria fue acompañada por su economía, que descansaba principalmente en productos agrícolas como el vino, el aceite, los cereales, el arroz, el algodón, y sus famosas artesanías.

Esta nueva ciudad ocupaba una posición más cercana al mar Jónico.

La presencia de arquitectos como Rosario Gagliardi, Francesco Sortino y otros, hicieron del nuevo Noto una obra maestra del barroco siciliano, llamado el «Jardín de piedra» por Cesare Brandi.

Las nuevas estructuras se caracterizan por una piedra de toba muy suave, que bajo la luz del sol asume una tonalidad típicamente melosa.

Tropas británicas en las calles de Noto en 1943
Una vista del ayuntamiento de Noto.
Porta Reale.
La iglesia dedicada a San Carlos Borromeo (Chiesa di San Carlo al corso) .
Un balcón del palacio Villadorata.
La iglesia dedicada a Santo Domingo (Chiesa di San Domenico) .