Su principal objetivo era acordar una paz con Esparta tan pronto como ésta pudiera obtenerse bajo condiciones favorables para Atenas.
Fue elegido de forma frecuente para servir como stratego (general) para Atenas durante la guerra del Peloponeso.
Tras la Paz, se opuso a los ambiciosos planes de Alcibíades para obtener mayores beneficios para Atenas.
Nicias fue ejecutado por las tropas del general espartano Gilipo, pese a su oposición, en las latomías de Siracusa.
Como tal, Nicias se convirtió en el principal rival político del partido demócrata radical de Cleón.
[5] Según Plutarco, Nicias no tenía el encanto o la elocuencia necesaria para conseguir el apoyo popular,[5] por lo que utilizó su riqueza para adquirir popularidad por la magnífica manera en la que desempeñó varios servicios públicos, especialmente aquellos relacionados con la religión del Estado, de la cual era un fuerte partidario.
Luego creó un fondo económico de 10 000 dracmas para que se pudiese continuar celebrando ese evento en el futuro.
[5] Tras una década de lucha entre Atenas y Esparta en la guerra del Peloponeso, ambos estados se encontraban exhaustos.
Atenas envió refuerzos al mando de Nicias, que pudo recapturar Mende.
Cleón terminó definitivamente con la tregua entre Atenas y Esparta cuando decidió rescatar la ciudad de Anfípolis en Macedonia.
Todos los aliados de Esparta aceptaron la firma del tratado salvo por Beocia, Corinto, Elis y Mégara.
Tantas oportunidades de éxito atenienses no fueron aprovechadas, pero, como ocurre siempre con la retrospectiva, se ve claramente sólo a posteriori.