[3] Tras ser echado de su trabajo, Norberto prueba suerte como vendedor en una inmobiliaria y demora en contarle a su mujer.
Tras vacilar, y sin consultarlo con su mujer, Norberto comienza a estudiar actuación en un taller de principiantes.
Mientras se prepara para la muestra trimestral, Norberto no logra ser creíble con los clientes ni con su esposa, pero descubre una gran habilidad para mentirse a sí mismo.
[5] Alrededor del año 2003, Hendler había empezado a escribir una historia coral llamada El día termina a las 10, descartó la historia y mantuvo los personajes para otra película coral, La mudanza, que incluía un personaje llamado Norberto el cual empezó a tener cada vez más protagonismo, hasta que la historia se transformó en Norberto apenas tarde.
Además, compitió en la 58.ª edición 2010 del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, en la sección Horizontes Latinos,[11] donde al premio lo obtuvo la película Abel, del mexicano Diego Luna;[12] ambas películas destacaron por su calidad técnica y artística.