La no monogamia consensuada (NMC), y su subconjunto la no monogamia ética (NME), se refieren a la práctica de relaciones íntimas o sexuales no monógamas que se diferencian de la infidelidad a raíz del conocimiento y consentimiento mutuo de los involucrados, así como de la poligamia en que los diversos participantes no hacen parte de un solo matrimonio.
La no monogamia consensuada puede tomar muchas formas diferentes, dependiendo de las necesidades y preferencias de las personas involucradas en relaciones específicas.
[1] Es común que parejas abiertas y swingers mantengan monogamia emocional mientras mantienen relaciones sexuales extradiádicas.
[2] De manera similar, los límites entre amigos/parejas en formas de no monogamia consensuadas distintas del poliamor son por lo general bastante claros.
Con todo, a diferencia de otras formas de no monogamia, «el poliamor destaca por privilegiar la intimidad emocional con otras personas».