Se expuso ese mismo año en París, un año antes de que los impresionistas montaran su primera exposición en un estilo radicalmente distinto al de Bouguereau, uno de las artistas más importantes del realismo burgués y del academicismo del Salón parisino.
Tres de ellas están tirando de él para darle un chapuzón, mientras que la cuarta invita por señas a otras bañistas para unirse a la diversión.
Ninfas y un sátiro es una muestra de su estilo, en el cual el manejo de las formas quita energía a lo que se está mostrando.
En Bouguereau, como en Greuze hay una perturbadora combinación de malicia e inocencia.
Actualmente se exhibe en el Instituto de Arte Clark, Williamstown, Massachusetts.