Ninette de Valois

Se retiró como bailarina en 1926, a los 28 años, para promover el ballet clásico por toda Europa.

En 1928 convenció a Lilian Baylis para que el Sadler's Wells Theatre pudiese ser sede de su compañía.

Con el tiempo, su compañía llegó a ser una de las más afamadas del mundo, con bailarines como Margot Fonteyn, Gillian Lynne, Robert Helpmann, Moira Shearer, Beryl Grey, y Michael Somes.

Se ocupó de que su compañía tuviera una fuente constante de talento, y en los años siguientes, la compañía contó con estrellas como Svetlana Beriosova, Antoinette Sibley, Nadia Nerina, Lynn Seymour, y, con la más sensacional posible, Rudolf Nuréyev.

Se retiró formalmente en 1964, y fue nombrada «Life Governor of the Royal Ballet», dejando sentir su presencia en la compañía.

La compañía pasó los años de guerra viajando intensamente por Gran Bretaña y, en menor grado, por Europa, bailando para las tropas aliadas.

Siete años más adelante, en 1963, Ashton sucedió con éxito a de Valois como su director, continuando creando sus propios ballets clásicos, incluyendo Monotones (1965/6) y las Enigma Variations (1968).

Fonteyn, mientras tanto, seguía siendo la prima bailarina; su emparejamiento final con Rudolf Nureyev dejó un rastro de pasiones por todo el mundo en los años 1960 y 1970.