Hizo aparecer sus primeras poesías en una colección impresa en 1529, Vandoperani, campani, epigrammata.
Además, se atacaban ahí las opiniones del teólogo y antihumanista Noël Béda o Bédier, síndico de la Sorbona y gran perseguidor de herejes.
Encontró en su entorno al pintor Hans Holbein el Joven, que en aquel entonces estaba llevando a cabo su segunda estancia en la corte de Inglaterra y dibujó su retrato.
Nicolas Bourbon, que le tenía una gran admiración, lo llamó «Apelle de notre temps».
A él, considerándolo un otro yo, le dirigió gratas palabras de aliento.