[2] Se dice que todos los hombres y las mujeres quedaban enamorados de Narciso, pero este los rechazaba.
Entre las jóvenes heridas por su amor estaba la ninfa Eco, quien había disgustado a la diosa Hera y por ello esta la había condenado a repetir las últimas palabras de aquello que se le dijera.
Para castigar a Narciso por su engreimiento, Némesis hizo que se enamorara de su propia imagen reflejada en un estanque.
En el sitio donde su cuerpo había caído, creció una hermosa flor, que hizo honor al nombre y la memoria de Narciso.
Se trata una historia moral en la que el orgulloso e insensible Narciso es castigado por los dioses por haber rechazado a sus pretendientes.
Se cree que es una historia moralizante dirigida a los adolescentes griegos de la época.
En la historia helénica, el joven Aminias ama a Narciso pero este lo rechaza cruelmente.