Nabopolasar

Después del 623 a. C. las crónicas nos presentan una laguna de siete años, pero en el 616 a. C. se ve a Nabopolasar mucho más afianzado y adoptando una posición ofensiva.

El ejército babilonio sometió varias ciudades del Éufrates medio, alcanzando Suhu e Hindanu (al sur de Harrán), y regresando con un lucrativo botín.

Elam se encontraba por entonces en plena decadencia, pero su rol sería ocupado por los emergentes medos (llamados umman-manda en las Crónicas de Babilonia).

Sin-shar-ishkun, el rey asirio, pudo haber perecido durante la destrucción de Nínive.

En otras áreas, como Hindanu o Rasapu en el Éufrates, Nabopolasar aplicó la deportación masiva, sentando un precedente que sería seguido por su hijo Nabucodonosor.

Además del Etemenaki, muchos templos fueron restaurados y reconstruidos, tanto en Babilonia como en otras ciudades de prestigio.