Sus municipios colindantes son Jocotepec, Juanacatlán, Chapala y Tlajomulco de Zúñiga.
El suelo predominante es el vertisol (69.9%), tienen estructura masiva y alto contenido de arcilla.
Tienen susceptibilidad a la erosión y alto riesgo de salinización.
Los tipos de recursos hídricos del municipio están constituidos por aguas subterráneas, ríos y lagos.
Los recursos del municipio los integran: el río Santiago y los arroyos de caudal durante la época de lluvias Los Sabinos, Los Lobos, Agua Escondida, Los Pinos, La Cañada y Grande.
Cuenta con las presas de almacenamiento: El Llano, El Carnero, Las Campanillas, La Capilla, El Carrizo y El Aniego.
La flora está representada por especies como pino, encino, oyamel, eucalipto, laurel de la India, galeana, pinabete, sauce, sabino, ozote, mezquite, guamúchil, guaje, fresno, nogal, guayabo, tepehuaje, mango, limonero, naranjo, copal, zapote blanco, tabachín, jacaranda, camichín, zalate, ahuilote, ciruelo, pirul, nopal y otras especies.
En la fauna se encuentran especies como coyote, conejo, armadillo, tlacuache, ardilla y víbora de cascabel.
Comparando este volumen poblacional con el del año 2015 (53, 045 habitantes), se observa que la población municipal aumentó un 28.13 por ciento en cinco años.
Otros indicadores como acceso a servicios de salud, a los alimentos, rezago edicativo, así como calidad y espacios de la vivienda, con 28, 10, 17 y 9 por ciento respectivamente.