En el acto estuvo presente la viuda del autor norteamericano, Mary Welsh.
No faltó al acto tampoco La Pamplonesa ni la banda municipal de txistularis interpretando el Agur Jaunak.
[1] Aunque no es pública, existe en Pamplona otra estatua de Hemingway, realizada por el escultor navarro José Javier Doncel,[3] en un anexo del Café Iruña que se llama precisamente El rincón de Hemingway y que recuerda bastante a otra estatua del novelista que colocada en el bar Floridita de La Habana (Cuba).
Está con los brazos cruzados, apoyados, en una posición típica suya observando los toros desde la barrera.
El bronce traza «un rostro de rasgos más realistas» en plena madurez.