Central nuclear de Brennilis

A pesar de las estimaciones iniciales del coste del proceso, que lo cifraban en 250 millones de euros, en 2008 la cifra se había disparado ya a los 480 millones.

La tercera fase se centra en el edificio del antiguo reactor.

Incluye: En esta fase aparecen desechos de muy larga vida que requieren almacenamiento en condiciones controladas.

En estos análisis se hallaron varios elementos radioactivos que provenían, sin lugar a dudas, de la central: cesio-137 y cobalto-60.

Por otra parte, se halló también una concentración anormalmente elevada de actinio-227, cuyo origen no está claro.

Se trata de ONET Technologies, una empresa de Marsella que también participará en otros desmantelamientos, con un presupuesto provisional que ya es casi 10 veces superior a las provisiones realizadas por EDF para este capítulo.