Monasterio de San Prudencio de Monte Laturce
Según cuenta la tradición, Prudencio, obispo de Tarazona, se encontraba en Osma para arreglar unos conflictos cuando murió.Para dilucidar el lugar donde se enterraría —por haber muerto fuera de su diócesis— se cargó el cadáver a lomos de una mula, que tras dos días de camino llegó hasta una cueva en la ladera del monte Laturce, donde paró.Allí fue enterrado y se levantó una iglesia dedicada a San Vicente.Los propietarios del monasterio, los señores de Cameros tuvieron ahí su panteón.Inicialmente estuvieron bajo la orden de San Benito, y en 1181 cambiaron a la cisterciense.