Estos 8 modos se clasificaban en dos tipos:[5] La teoría musical griega distinguía tres géneros de escalas:[6][7] Durante la Edad Media se llevó a cabo una reorganización del sistema modal, de tal manera que los modos pasaron a ser ascendentes.
La iglesia bizantina desarrolló en sus orígenes un sistema de ocho modos musicales (el oktōēchos), que sirvió como modelo para que los teóricos del canto llano medieval europeo desarrollaran su propio sistema de clasificación modal a partir del siglo IX.
Este nombre fue tomado por el teórico Ptolomeo del siglo II junto con otros seis para designar sus siete tonoi o tonalidades de transposición.
Los modos eclesiásticos no se organizan sobre tónica y dominante, sino sobre la nota finalis, similar a la tónica y que se corresponde con la primera nota en los modos auténticos, y la tenor o nota de recitación, "que sostiene", ésta no es una dominante estrictamente porque la dominante tiene relaciones más complejas, ésta solo sostiene.
Cada modo o escala modal tiene una nota característica que le otorga su singularidad y con ello su sonoridad particular.