[2] El modelo de Fisher se dirige al problema de la adaptación (y, hasta cierto punto, a la complejidad), y continúa como una fuente para la investigación contemporánea en las consecuencias genéticas y evolutivas de pleiotropía.
[3] El modelo tiene dos formas, una con un formalismo geométrico y la otra con una analogía de microscopio.
[3][2] En su modelo, Fisher sostiene que el funcionamiento del microscopio es análogo con la aptitud de un organismo.
Si existen muchas formas distintas para cambiar un fenotipo, resulta poco probable que un cambio aleatorio haría una combinación correcta para mejorar la aptitud.
De este argumento, ampliamente compartida, procede la idea que la evolución ocurre por mutaciones pequeñas.