Como resultado la superficie alar y el tamaño general fueron incrementados significativamente, equiparándose al P-47 Thunderbolt .
No fue hasta 1942 que el diseño del M-50 Reppu (Huracán) comenzó, pero las continuas presiones soportadas por Mitsubishi respecto a desarrollos del A6M condujeron a que no fuese hasta el 6 de mayo de 1944 que el primer prototipo del nuevo modelo, conocido por la compañía como Mitsubishi A7M1, alzase el vuelo por primera vez.
El resultante A7M1 probó el desajuste entre el motor y el fuselaje, acabando en una velocidad máxima un poco más alta que la del Zero, la cual quedaba por debajo de la requerida en la especificación oficial.
El A7M2 fue equipado también con flaps de combate automáticos, usados anteriormente en el Kawanishi N1K-J, aumentando significativamente la maniobrabilidad.
8 prototipos fueron completados al final de la Segunda Guerra Mundial, pero nunca llegaron a ser vistos en combate.