Consiste en dos satélites casi idénticos, provistos de instrumentos para obtener imágenes estereoscópicas del Sol y de los fenómenos solares, como la eyección de masa coronal (EMC), erupciones que pueden desatar serias tormentas magnéticas en la Tierra y afectar la infraestructura eléctrica, las comunicaciones vía satélite y la aeronavegación.
La misión es liderada por la NASA y el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins de Maryland.
Entre los constribuyentes más destacados de esta misión espacial está el Reino Unido que dotó a las sondas de sus sistemas de cámaras, que incluyen aparatos especializados en imágenes heliosféricas.
El 15 de diciembre de ese año, en la quinta órbita, ambas sondas utilizaron la órbita de la luna para situarse en una órbita heliocéntrica.
Cada sonda posee cámaras, detectores de partículas y de radio en cuatro paquetes de instrumentos: