Misión Klein-Saks

La Misión Klein-Saks fue una comisión de economistas estadounidenses que operó en Chile entre 1955 y 1958, convocada por el segundo gobierno de Carlos Ibáñez del Campo para disminuir la inflación que afectaba al país.

Este estilo de desarrollo se sostuvo en un modelo de «desarrollo hacia adentro» o de industrialización por sustitución de importaciones (o modelo ISI, por sus siglas), y perseguía la industrialización nacional orientada hacia el mercado interno a través del fomento estatal en las principales áreas económicas.

Si bien en un comienzo este grupo tuvo la tarea de proponer políticas para estabilizar la moneda y controlar la inflación, finalmente llegó a ser un programa global de transformación económica, aunque nunca haya llegado a proponer la sustitución completa del modelo económico.

Cabe destacar que el diario El Mercurio promovió desde el comienzo la llegada de la misión Klein-Saks, siendo Agustín Edwards Budge su principal gestor y promotor.

[2]​ En consecuencia, las principales recomendaciones fueron: Aun cuando las propuestas de la misión Klein-Saks no fueron aceptadas en toda su magnitud por los partidos políticos de aquel entonces, se puede señalar que tanto la asistencia de estos consultores, su difusión y defensa durante el período, demuestran que la liberalización económica contaba en el país con cierto apoyo, sobre todo en los sectores económicos agrupados en torno a El Mercurio.