Gracias a esto logra estudiar en la escuela los Franciscanos de su ciudad natal.
Unificó a los villareños sublevados, siendo nombrado Mayor General del Ejército Libertador de Cuba.
Defendió con firmeza la anexión de Cuba a Estados Unidos.
Gravemente herido, pero vivo, fue atado a un caballo que iba al galope.
Este hecho ocurrió en un lugar no especificado de Las Villas.