[1] Además, también tiene los derechos sobre algunos elementos con copyright como las producciones teatrales y las películas.
Por otra parte Middle-earth Enterprises ha cedido licencias sobre sus derechos a otras compañías para su uso como marcas comerciales y de servicios.
[3] Esta decisión contribuyó a que en 2001 ICE se declarase definitivamente en bancarrota, pues los juegos basados en la Tierra Media habían sido hasta entonces su principal fuente de ingresos.
En 2004 Tolkien Enterprises demandó a New Line Cinema por el impago de más de 20 millones de dólares en concepto de regalías, basándose en la diferencia entre los beneficios brutos y netos que había generado La Comunidad del Anillo, y los términos exactos sobre las regalías que habían firmado ambas compañías.
Posteriormente, en 2003, participó en el desarrollo del videojuego de El hobbit, enfocado al público infantil.