Este movimiento se fundó sobre el apoliticismo (en las antípodas de las concepciones del grupo Dadá en Berlín, que se caracterizaba por estar comprometido políticamente), lo fantástico y el constructivismo.
Sus principales pilares eran la revista Merz y el arte del mismo nombre.
Su actividad artística se fundaba sobre el collage; sobre sus telas se encontraban boletos de ómnibus, pedazos de afiches, periódicos, lana, botones, telas, etc.
Su obra fue prohibida por las autoridades nazis a su llegada al poder en 1933 e incluida en las listas de "arte degenerado".
Tras la invasión nazi del país nórdico huyó en barco a Edinburgo.