El avión iba provisto con una videocámara montada en el morro que permitía controlar todos los movimientos.
El X-36 resultó inestable en guiñada, cabeceo y también en el eje de rotación.
Para hacerlo estable se diseñó un sistema digital de control fly-by-wire.
[2] El programa funcionó muy bien, y se consiguieron alcanzar objetivos muy superiores a los marcados.
A pesar de su potencial y del enorme éxito de los experimentos el proyecto se detuvo y no se han comunicado más informes sobre el desarrollo del X-36 hasta el momento.