Se integró a las milicias cívicas como alférez de artillería en 1813 y en 1815 se incorporó al batallón 11 de Cazadores.
En 1817 se sumó al Batallón N.º 1 Cazadores del Ejército de los Andes.
Integró la nómina de oficiales ascendidos tras la batalla (fue ascendido a capitán graduado) y recibió el cordón y medalla correspondientes.
Casó con Rosario Doria y Saravia en Chile, donde finalmente se afincó hasta su muerte.
Tuvo cuando menos una hija, que casó con el capitán Rafael Navarrete.