Mary Astor

Tras superar los escollos en su vida privada, alcanzó mayor éxito en la pantalla y ganó un Óscar como mejor actriz de reparto por su actuación en La gran mentira (1941).

Astor fue educada en casa y su padre le enseñó a tocar el piano.

Su talento para el piano resultó útil cuando tuvo que interpretar algunas melodías en las películas La gran mentira y Cita en San Luis.

Lucille firmó un contrato con la Paramount y cambió su nombre por el de Mary Astor.

Firmó un nuevo contrato con la Paramount que le garantizaba un sueldo de 500 dólares a la semana.

Trabajó de nuevo junto al actor en otra película legendaria: Don Juan (1926, Alan Crosland), donde se hicieron los primeros ensayos serios del cine en color.

Los estudios consideraron que su voz era demasiado profunda para la pantalla y dejaron de ofrecerle papeles.

Tras este reconocimiento, y algún título más de éxito como Sobre el Pacífico (Across the Pacific, 1942, John Huston, su carrera comienza a centrarse más en papeles secundarios: Así llegan títulos tan famosos como Cita en San Louis (Meet Me In St.

Así, su papel más relevante en esta década en la pantalla es en una comedia poco distinguida de Blake Edwards: This Happy Feeling, estrenada en 1958.

Mary Astor junto junto a Ricardo Cortez en la película de 1931 Behind Office Doors .