Durante un breve período, Mario Ruiz Massieu fue capaz de presentarse como el ángel vengador.
Él escribió una columna política en un periódico y un libro, titulado Yo Acuso.
En diciembre del 94 con la asunción del presidente Ernesto Zedillo, al mes siguiente, y con el nombramiento de un equipo nuevo para el proceso, la red comenzó a cerrarse.
Sin embargo, al cambiar los vuelos de España a Newark, Nueva Jersey, él no pudo declarar los 46.000 dólares que llevaba, lo que permite a las autoridades estadounidenses detenerlo.
Durante los últimos tres años y medio de su vida, Mario Ruiz Massieu había estado bajo arresto domiciliario en Nueva Jersey.
La versión oficial dice que se quitó la vida el día de la independencia en México.