Allí conoció a diversos pintores hiperrealistas, integrantes de lo que se ha denominado como realismo madrileño.[3] Moreno se integró en la tradición de los realistas españoles, cuyas características incluyen la perfección técnica y la representación realista de los acontecimientos contemporáneos.Expuso de forma individual en Frankfurt en 1973, en la galería Herbert Meyer-Ellinger, y en la Claude Bernard en París, en los años 90.El caso de mujeres artistas ensombrecidas por sus homólogos masculinos no fue aislado: al igual que ella, otras artistas del grupo de Realistas de Madrid, como Isabel Quintanilla, Esperanza Parada o Amalia Avia, han pasado como figuras más desapercibidas.[5] En 1961 María se casó con Antonio López, el pintor más representativo del realismo español.