Vivió en Lima hasta 1988, donde se ocupó de los niños en particular, como educadora, catequista y enfermera.
A pesar del clima de inseguridad cada vez mayor desarrollaba actividades que promovían una mejor educación para los niños y un mayor acceso a la alimentación y la salud.
Sendero Luminoso no toleraba sacerdotes y monjas católicas, a los que acusaban de desviar las poblaciones de la revolución armada bajo su ideología marxista, la religión es el opio del pueblo.
Los sacerdotes Michał Tomaszek, Zbigniew Strzałkowski y Alessandro Dordi, víctimas de este grupo terrorista, fueron beatificados en 2015.
El objetivo es demostrar su práctica ejemplar de las virtudes cristianas y su muerte por la fe.