Desempeñó el puesto de capellán real y comisario del Santo Oficio (Inquisición).
En esa misma ciudad vivía una prima suya llamada Margarita que era monja en el Convento de Santa Fe.
Fue enterrado en la Iglesia Magistral de los Santos Justo y Pastor, donde en una lápida aparece un epitafio latino suyo.
A veces sorprende con un humor chocarrero y de mal gusto.
Escribió comedias en colaboración con el padre Diego Calleja,[4] y alguna otra solo, pero destacó especialmente como poeta festivo e ingenioso y en el subgénero dramático del entremés, del cual según Felicidad Buendía se conservan dieciséis.