Estudió humanidades y teología escolástica con objeto de alcanzar su vocación clerical.
Si bien, Manuel Díaz renunció a este cargo para no tener que ausentarse y abandonar su labor pastoral.
En esta isla conoce al escultor e imaginero orotavense Fernando Estévez de Salas con quien guardó gran amistad y a quién encomendó la realización de algunas obras religiosas para la Iglesia de El Salvador, tales como el Santísimo Cristo del Perdón o la imagen de la Virgen del Carmen.
[2] En La Palma, Díaz ejerció una gran influencia en la vida pública a lo largo de gran parte del siglo XIX, destacando además en el ámbito de las bellas artes, principalmente en la pintura, música, escultura, educación, beneficencia y otras.
Originalmente fue enterrado en el cementerio municipal de Santa Cruz de La Palma, hasta que en 2008 su cuerpo fue trasladado a la Parroquia Matriz de El Salvador.