Comenzó su actividad sindical como cenetista, siendo en 1920 redactor del periódico libertario El Comunista, pasando posteriormente a militar en el socialismo.
[1][2] Conoció a Andrés Saborit, quien lo introdujo en la alta dirección socialista.
Fue presidente del Centro Republicano Español de México.
Orgulloso de su comunidad autónoma, colaboró en la revista "Aragón", editada por los exiliados aragoneses en México.
[1] Se mudó dos años a Toulouse (1953-1955), siendo enviado por el PSOE para mejorar la edición de El Socialista; pero, delicado de salud, regresó a México, donde falleció al poco tiempo.