Este vocabulario en su etimología viene del español antiguo mamparar, amparar y a su vez quizás proceda del latín «manu parāre» que quiere decir detener con la mano.
Las mamparas de baño se clasifican según el elemento que vayan a cubrir.
Este tipo de mamparas son iguales que las fijas tanto en medidas, la diferencia es que esta hoja se mueve sobre el eje desde la pared, permitiéndonos así un mejor acceso a la bañera.
Cubren la totalidad del largo de la bañera y se superponen, solapándose entre ellas.
Las que se adaptan a duchas rinconeras sin embargo, pueden adoptar formas curvas.