Constituye un trabajo musical formal del grupo con una orquesta de cámara completa.
Esta constituye la segunda ocasión en que el grupo debe musicalizar textos poéticos ya escritos, y no necesariamente compuestos como canciones.
El poema da lugar a que Los Jaivas intenten revivir sus anteriores trabajos con orquestas sinfónicas y compongan música y arreglos para estos poemas, teniendo como perspectiva un álbum completamente sinfónico, que deja atrás otros proyectos, pero resulta sumamente atractivo para el público y para la escena musical chilena de fines de los 90.
La orquesta también ejecuta en solitario un tema completo ("Interludio"), a partir de la base instrumental del corto tema que abre el disco ("Alumno") y que es un primer homenaje a la poetisa Gabriela Mistral.
Los arreglos para la obra fueron realizados por Los Jaivas en colaboración con el compositor chileno Fabrizzio de Negri.