Mallos de Riglos

Al crearse la cordillera pirenaica, la erosión provocó que gran cantidad de material fuera arrastrado hacia el sur por cauces que vertían sus aguas a la antigua depresión del Ebro, depositándose y sedimentándose en enormes conos de deyección.La meteorización, sobre todo la de tipo fluvial, abrió profundas barranqueras ensanchándose las fisuras y formándose las características chimeneas.Cada mallo tiene un nombre propio, cuyo origen procede en algunos casos del nombre de algunas casas de Riglos (Firé y Pisón), de su forma o color característico (el Puro, el Cuchillo, la Visera, del Agua, os Fils, Colorado, Magdalena, Aguja Roja, Tornillo, Tornillito) o en homenaje a otras personas no relacionadas necesariamente con el mundo de la escalada (de los Castellanos, Melchor Frechín, Roberto Martí "Chichín", José Enrique Herrera, Mariano Cored, Víctor Carilla, Luis Gómez Laguna, General Capaz, Don Justo).Respecto a la toponimia de los mallos pequeños, a la zona se la denomina "os galochos", que en aragonés, galacho o galocho significa zona angosta o de paredes verticales creada por la erosión del agua.Los mallos grandes son: Los mallos pequeños son: Más al este, destacan el Paredón de los Buitres, también llamado mallo Arcaz, y el Macizo d'os Fils -"de los hilos" en aragonés, por su estratificación horizontal- donde destacan la Peña don Justo, en homenaje a don Justo Garasa, el Tornillo y el Tornillito o Falso Tornillo, ambos por su forma característica.
Mallo Pisón, desde la iglesia de Riglos.
Vista de los Mallos de Riglos desde Peña Rueba. Mallos Firé, Castilla y Pisón
Vista de los Mallos de Riglos desde el río Gállego.
Escalada en La fiesta de los Bíceps a la Visera. Mallos de Riglos