Malakbel fue una deidad solar en la antigua ciudad preislámica Siria de Palmira.
[1] Los griegos le identificaban con Hermes y los romanos con Sol.
En Palmira, su lugar de culto principal, solía estar acompañado por la deidad lunar Aglibol y eran adorados, fundamentalmente por la tribu Bene Komare, en un santuario llamado de los Jardines Sagrados.
En ocasiones, junto a Aglibol, se encontraba el dios supremo Baalshamin, formando en este caso, una famosa tríada local que celebraba la eternidad celeste y los beneficios del calor vinculado a la humedad.
Otras veces se le encontraba acompañado de la diosa Al-lat.