[1] Desencadenada la revolución de 1868, abandonó sus negocios más apremiantes para presentarse a Don Carlos y ofrecerle sus servicios.
Emigrado en Bayona, el año 1873 escribió un libro en francés titulado Le droit de Charles VII au trône d'Espagne, que tuvo considerable éxito.
[1] Al estallar la tercera guerra carlista en las provincias del Norte, entró en España y fue nombrado Corregidor de Vizcaya.
De este acto sacó un cuadro el pintor Antonio María Lecuona.
[2] Cuando los carlistas tuvieron que emigrar a Francia, el conde del Pinar no se separó del lado de Don Carlos, y fijó después su residencia en San Juan de Luz.