Al igual que muchos de sus antecesores, sirvió en la Lugartenencia y en la Capitanía general, con una gran aceptación.
Una obra sencilla, con apenas diez personajes, y de un tono más cuotidiano.
Se sitúa alrededor de personajes nobles, criados y moros.
Además, encontramos un poemario, ya que escribió numerosos poemas para certámenes y fiestas.
Luis Ferrer de Cardona fue reconocido en su época como un escritor muy popular, que escribía poesía y comedias destinadas a pequeñas fiestas.
[1][7] En el Laurel de Apolo (1628-1630), le elogia diciendo: la dulcísima lira, pues su canoro canto al mundo admira?
El verso conceptuoso y las quintillas perfetas, del oculto Ricardo busque, pero no afecte su estrella.