Leucipa y Clitofonte

Sin embargo, Clistenes yerra y secuestra a Caligone, la prometida del protagonista, en lugar de Leucipa.

Clitofonte intenta visitar a Leucipa por la noche en su habitación, pero la madre de esta, alertada por un sueño premonitorio, los descubre.

Tras padecer un naufragio, llegan al delta del Nilo donde un grupo de bandidos los captura.

Leucipa se salva finalmente gracias al antídoto que un nuevo personaje, Céreas le proporciona.

Leucipa, por su parte, prueba que su virginidad se mantiene intacta entrando en el templo de la diosa Artemisa.

[2]​[3]​ Una copia de Leucipa y Clitofonte se conservaba en la extensa biblioteca del magnate provincial bizantino Eustacio Boilas en el siglo XI.