Lorenzo Nielfa

[1]​ Permanecería en la Encarnación bajo la dirección del maestro Ignacio Ducasi y Ojeda hasta la invasión francesa de 1808.

Gracias a su prestigio y su excelente trabajo, con el tiempo, sin que se pueda datar la fecha, pasó a ejercer el cargo de maestro de capilla.

Su única heredera fue Carmen Fornielles de García, sobrina adoptiva.

También tuvo una sólida amistad con Hilarión Eslava, que aparece entre los testamentarios.

Al parecer, contaba con el apoyo del maestro de la Real Capilla, Francisco Federici, que alabó el que se hubiese formado con los mejores maestro de música.