El Lockheed XB-30 (modelo de compañía L-249)[1] fue un diseño presentado por Lockheed a una solicitud de las Fuerzas Aéreas del Ejército de los Estados Unidos por un bombardero muy pesado, la misma solicitud que condujo al Boeing B-29 Superfortress, al Douglas XB-31 y al Consolidated B-32 Dominator.
Alrededor de 1938, el general Henry H. "Hap" Arnold, el líder del Cuerpo Aéreo del Ejército de los Estados Unidos, se fue alarmando ante la posibilidad de guerra en Europa y en el Pacífico.
Deseando estar preparado para los requerimientos a largo plazo del Cuerpo Aéreo, Arnold creó un comité especial presidido por el general de brigada Walter G. Kilner; uno de sus miembros fue Charles Lindbergh.
Basado en el diseño del Lockheed L-049 (posteriormente adoptado por las Fuerzas Aéreas del Ejército como C-69), el L-249 nunca pasó de la etapa de diseño, principalmente debido a que Boeing tenía una gran ventaja con su Boeing B-29 Superfortress, usando los mismos motores radiales Wright Duplex-Cyclone que se suponía que iba a usar el XB-30.
Reteniendo las alas y las superficies de cola del Model 49, el Model 249-58-01 debía haber tenido un nuevo fuselaje con hasta seis torretas artilladas (una en la proa, dos encima y dos debajo del fuselaje, y una en la cola) con 10 armas de 12,7 mm (emparejadas en cada torreta de los emplazamientos de la proa, dorsales y ventrales); y un cañón de 20 mm en la posición defensiva de la cola.