Su tío materno, Josep Garí, era primo segundo de Josep Puig i Cadafalch, al que encargó la reforma de su casa estival del Cros (Argentona), en 1898; esta obra impresionó al pequeño Lluís, lo que le decantaría hacia el oficio arquitectónico.
Una vez obtenido el título de arquitecto formó un estudio con Joan Bergós, Antoni Puig i Gairalt, Albert Carbó y el escultor Rafael Solanic.
[3] En los años 1920 construyó dos interesantes edificios residenciales en Barcelona: la casa Riudor (calle Marià Cubí 13, 1926) y la casa Salvat (calle del Consejo de Ciento 486, 1928), donde mezcló elementos de la arquitectura tradicional y del Renacimiento italiano.
[6] En los primeros años 1930 aunó el novecentismo con la arquitectura tradicional catalana, como se denota en obras como un chalet en Vilasar de Mar, la casa Bonet-Godó en Teyá, la casa Carreras Patxot en Pedralbes, el Hotel Prudenci en Tona, el edificio de la avenida Diagonal 407 en Barcelona y la casa Maria Darna en Pedralbes.
[5] En cambio, el edificio de la discográfica Polydor en San Adrián de Besós —hoy día casa consistorial— tenía un sello más racionalista, por influencia del arquitecto alemán K.
[8][9] Otra gran obra que se prolongó desde 1930 hasta 1980 fue la de las Cavas Codorniu en San Sadurní de Noya, donde también sucedió a Puig i Cadafalch.
[11] En 1946 diseñó también la cruz de Pedralbes, situada en la plaza frente al monasterio homónimo.
[19] Desde esa fecha y hasta el cese de su actividad en 1982 se enmarcó en un período marcado por el retorno a sus raíces, donde sería primordial la influencia gaudiniana.