[1] En su juventud, Ligia Montoya viajó de Buenos Aires a España, donde completó su educación primaria y secundaria.Desde 1952 Ligia Montoya mantuvo comunicación con Gershon Legman, con quien trabajó cooperativamente por años en aspectos técnicos y artísticos del origami.[4][5] A través del Origami Center of America y contactos de Legman, Montoya desarrolló una extensa comunicación con la fundadora del centro, Lillian Oppenheimer, así como con Alice Gray, Fred Rohm y Samuel Randlett en los Estados Unidos; Robert Harbin e Iris Walker en Inglaterra; Akira Yoshizawa en Japón.Mantuvo una correspondencia generosa con muchos otros plegadores en todo el mundo, pero rodeó su vida privada con una barrera de modestia que nadie podía traspasar".Harbin, quien allí la llamó "la mujer más destacada en la actualidad", expresó: "Sus creaciones, que son innumerables, van desde simples figuras de pájaros y flores hasta insectos increíblemente difíciles.