Esta ley fue elaborada durante el mandato del presidente Plutarco Elías Calles, a quien debe su nombre.[3] Desde el inicio de la Revolución Mexicana, muchos líderes políticos y revolucionarios dieron un énfasis anticlerical a sus discursos, en algunos casos llegando a tener un matiz antirreligioso.[4] En mayo de 1925, y como respuesta a las presiones del gobierno contra la iglesia, se fundó la Liga Nacional para la Defensa de las Libertades Religiosas.Tres meses después, la Liga Nacional para la Defensa de las Libertades Religiosas inició un boicot contra el gobierno, pidiendo la abstención en el pago de impuestos y en el consumo de productos creados por el Estado, causando grandes pérdidas económicas al país.[2] Ante las acciones contra la ley Calles, el gobierno decidió aprehender a quienes organizaran o participaran en ellas, por lo que la Liga Nacional para la Defensa de las Libertades Religiosas decidió organizar un levantamiento armado, mismo que se inició en enero de 1927 en Jalisco, expandiéndose por todo el país y dando comienzo a la Guerra cristera.
Personas promoviendo un boicot contra el gobierno debido a la ley Calles.