Brahmi

Los registros sobrevivientes de esta letra se circunscriben principalmente a inscripciones en edificios y tumbas, así como en textos litúrgicos.

Las inscripciones brahmi más conocidas son los Edictos de Ashoka, que están excavados en roca en el centro-norte de la India y que datan del siglo III a. C. Estos son tradicionalmente considerados como los primeros ejemplos conocidos de la escritura Brahmi, a pesar de que los recientes descubrimientos sugieren que la letra brahmi puede ser algo más antigua.

Se han propuesto varias hipótesis, pero ninguna cuenta con pruebas suficientes que la respalden ni pongan de acuerdo a los estudiosos.

El consenso académico tradicional se basa en Albrecht Weber (1856) y en Sobre el origen del alfabeto indio brahma (1895),[4]​ y sostiene que el brahmi deriva de la escritura imperial aramea, como fue claramente el caso del alfabeto kharoshti, de la misma época, que surgió en el noroeste de la India bajo el control del Imperio aqueménida (550-331 a. C.).

Algunos estudiosos, como F. Raymond Allchin, toman el brahmi como un desarrollo puramente indígena, tal vez proveniente de la escritura del Indo de la Edad del Bronce.