Lesión por onda expansiva

Las lesiones por onda expansiva se dividen en cuatro clases: primaria, secundaria, terciaria y cuaternaria.[3]​ Las lesiones secundarias son causadas por «traumatismos, contusos, penetrantes o empalamientos» con materiales lanzados por la explosión.[4]​ Estas lesiones se causan cuando una persona «es arrojado contra un objeto sólido o al suelo».[5]​ Hay aceleración y desaceleración rápidas que causan traumatismos «derivados de la fuerza directa».[4]​ Las lesiones cuaternarias son causa directa de la explosión, pero no califican como primarias, secundarias o terciarias.[1]​ Independientemente del medio, todas las explosiones liberan una gran cantidad de energía en diversas formas.Todas estas ondas pueden reflejarse en objetos o personas, pudiendo interaccionarse y aumentando el efecto lesivo.La velocidad en la que viaja esta onda varía a su paso por órganos y tejidos de diferentes densidades.En estos casos, las lesiones de asas intestinales son las más comunes junto con las contusiones y hemorragias pulmonares.[10]​ La mayor cantidad de muertes ocurre cuando la explosión acontece en espacios reducidos o en donde se produzca un colapso estructural.Si hay colapsos estructurales, habrá un mayor número de heridos graves y serán transportados más lentamente.[12]​ En situaciones con un gran número de heridos, las víctimas deben ser categorizadas con base en diversos factores (triaje): «fisiológicos, anatómicos, modalidad traumática, edad, etc».
Diagrama de las lesiones por onda expansiva de una explosión.
Una onda expansiva visible de una explosión convencional. Las lesiones primarias por explosión son causadas por la onda expansiva.