Les Marquises

Está considerado como el testamento musical de Brel ya que el artista se sabe condenado por la enfermedad cuando empieza su grabación.

Jacques Brel llevaba varios años instalado en las islas Marquesas y vivía retirado de la vida pública luchando contra un cáncer del pulmón cuando decide volver a París para trabajar en un nuevo álbum.

Con medio pulmón menos y el segundo irradiado, Brel tan solo graba dos canciones por sesión según un ritual fijo : una toma, en directo junto al orquesta.

Además de los doce temas que componen el álbum, cinco canciones más fueron grabadas durante las sesiones : Mai 40, Avec élégance, Sans exigences, L'amour est mort y La Cathédrale.

Sin ninguna promoción, sin entrevistas, el álbum se coloca en primera posición del ranking de ventas en Francia.