[2] Desde 1857 se interesó por las nacientes tecnologías de la Revolución Industrial, como el uso del carbón y el ferrocarril.
[2] Se le consideraba un hombre moderno en la época, que trajo expectativas de un nuevo futuro a la localidad.
En 1865 fue elegido diputado a Cortes por el distrito electoral de Zaragoza.
[2] Las obras del ferrocarril supusieron un revulsivo para la vida económica y social de la zona.
[1] Se le atribuyen igualmente ideas precursoras sobre el aprovechamiento de la energía eólica del cierzo para la molienda.
[10] Hacia 1880 empezó su decadencia, siéndole embargadas propiedades por deudas con el ayuntamiento y transfiriendo sus concesiones ferroviarias a la Compañía de los ferrocarriles de Tarragona a Barcelona y Francia.