La lava es magma que, durante su ascenso a través de la corteza terrestre, alcanza la superficie.
[1] Debido a su formación a partir de roca viscosa fundida, las erupciones y coladas de lava crean formaciones distintivas y características topográficas especiales, desde el nivel macroscópico al microscópico.
Esto es un mecanismo muy corriente en la mayoría de coladas basálticas, y permite a la lava alcanzar distancias elevadas, llegando incluso a desaguar en el mar habiendo fluido únicamente por el interior del tubo.
Las erupciones de lava son afectadas en ocasiones por peculiaridades que les producen mayor grandeza.
Hay únicamente unos pocos sitios en el mundo donde existen lagos permanentes de lava.
Las rocas formadas por la lava de distintos volcanes, difieren mucho en su apariencia y composición.