La hora fría

Incluso en lo que es su hogar, no están a salvo, pues los Extraños, –los hombres que se han convertido en zombis, por causa de las armas químicas del enemigo–, y los Invisibles, –unos espectros malignos–, les persiguen incluso allí dentro.Cuando las medicinas y alimentos empiezan a escasear, el grupo debe abandonar el área segura para aventurarse en busca de víveres, una incursión que despertará a las fuerzas que se ocultan en los alrededores del lugar.La película tuvo una larga fase de efectos visuales y todo su color fue retocado por medios digitales, trabajo a cargo del colorista Régis Barbey mano a mano con el director de fotografía Ángel Luis Fernández (habitual colaborador de Pedro Almodóvar, Fernando Trueba y Víctor Erice).Mediante la magia digital se ha conseguido crear desde el vaho del aliento de los actores, originado por el gélido fenómeno que da título a la película, a las criaturas monstruosas que les aterrorizan, pasando por la fusión de imágenes rodadas en Canarias y la península, e incluso la creación de decorados digitales.Los seres que aparecen en la película fueron creados por Pablo Fernández Valbuena, diseñador conceptual especializado en la creación de criaturas para videojuegos, y ganador del CG Choice Award de GgTalk.