[3][2] La obra, pintada al óleo, representa en un paisaje agreste, en primer término de espaldas al espectador, a un atleta adulto sentado en un objeto cúbico y, en segundo término, a una niña haciendo equilibrios sobre una bola.
Picasso desde 1904 visitaba regularmente el Circo Medrano, instalado cerca del Bateau-Lavoir, donde tenía su estudio.
[3][1] El poeta Guillaume Apollinaire, amigo de Picasso, se refirió a la acróbata de la bola «casi como un fresco»[5] y como una «danza estelar», en relación a la armonía del cosmos.
[2] El cuadro está pintado sobre una tela reutilizada que Picasso ya había usado anteriormente para el retrato del pintor Francisco Iturrino,[3] expuesto en 1901 en la galería de Ambroise Vollard, en París, durante la primera exposición de Picasso, que compartió con el mismo Iturrino.
[6] Adquirida en 1907 por la pareja de escritores y coleccionistas estadounidenses Leo y Gertrude Stein, pasó luego a la galería del marchante de arte alemán Daniel-Henry Kahnweiler, que la vendió en 1913 al coleccionista ruso Ivan Abramovich Morozov.