LaSal

Más tarde se sumaron Maria Bauçà, Mireia Bofill, María José Quevedo, Carmen Casas, Montserrat Abelló, Mercè Fernández, Isabel Segura, Goya Vivas y Eugenia Curto,[2]​ además de Sat Sabaté y Montse Solà, involucrando a muchas otras mujeres en el transcurso del tiempo.

Es considerada la primera editorial feminista del España,[3]​ sumándose así a la Biblioteca Popular de la Mujer, fundada en 1909 por Francesca Bonnemaison y considerada la primera biblioteca de Europa dirigida a las mujeres.

Un espacio donde “una se lía a hablar cono otra y descubre que sus problemas sueño comunes, lo mismo que muchas de sus aspiraciones y pensamientos” (Ana Lorenzo).

[5]​ El local contaba con dos pequeñas salas anexas: en una se creó una biblioteca, que creció muy rápidamente -en parte porque las propinas se invertían en libros- y la otra, funcionaba como sala de reuniones.

Se celebraron algunos actos multitudinarios, que permanecen en la memoria de muchas mujeres, tales como la presentación del libro Nuestros Cuerpos, nuestras vidas y también la del libro de Antonina Rodrigo, Las olvidadas, que contó con la presencia de Federica Montseny en su primera visita después del exilio .

Uno de ellos, que funcionó hasta el 1990, fue el proyecto editorial con el mismo nombre: laSal.